martes, 27 de febrero de 2024

A todo tren quiere ir Colombia

 

Locomotora. Foto de Ferrocarriles del Norte de Colombia Fenoco.

A todo tren quiere ir Colombia con la decisión en firme que ha manifestado el actual gobierno nacional para reactivar el transporte ferroviario, que en el pasado fue fundamental en la movilización de pasajeros y de carga a lo largo de territorio nacional.

 

Un poco de historia sobre el ferrocarril en Colombia

Fueron dos grandes corredores férreos que formaron el ferrocarril del Pacifico que comunicaba el suroccidente de este país y el ferrocarril del Atlántico  que  integraba la zona norte  y su  costa con el resto de Colombia.

En este orden de ideas las exportaciones de  café, en el interior andino y de productos como el banano en el litoral norte, fueron cruciales  en la construcción de la estructura ferroviaria, dado que se requirieron medios eficaces  para sacar las cargas de café colombiano  y de banano  al exterior.

De allí que las zonas  andinas colombianas  de producción  cafetera se vieron privilegiadas con el desarrollo de esta infraestructura, cuya finalidad era llevar el café a los puertos sobre el Pacífico como Buenaventura y a los del Caribe como Barranquilla, y,  también a los  principales afluentes  del país, cuando la navegación fluvial en ríos como el Magdalena y el Cauca, movilizaba  una considerable  cantidad de  personas y carga de mercancías.

En este contexto fue que la red ferroviaria se extendió, arrancando con  236 km construidos para el año 1885, para pasar a  875 km en 1910, y a 2 700 km en 1930; las regiones tenían el manejo de sus ferrocarriles.

El capital extranjero fue vital en el desarrollo del gran proyecto ferroviario con empresas como Colombian National Railway Company Ltd y la Great Northern Railway of Colombia Ltd, que dadas las complejidades que le quitaron rentabilidad al negocio, hicieron que en 1954 el transporte férreo se nacionalizara con la creación de los Ferrocarriles Nacionales de Colombia.

Colombia a  comienzos del siglo se movía en tren, sin embargo, las cosas empezaron a cambiar cuando después de los años 1970  Ferrocarriles Nacionales de Colombia entró en crisis,  empezando a dársele  más auge a la construcción de carreteras, hecho  que incrementó el transporte de vehículos, desestimando paulatinamente el uso del tren, por otra parte los sobrecostos de operación,  el deterioro del servicio y  la elevada  carga pensional de la empresa  frente a los trabajadores activos,  fueron la justificación  para que en octubre de 1986 el gobierno nacional  determinara dejar de seguir operando el sistema férreo.

En 1988  se  creó Ferrovías para mantener la infraestructura  y los proyectos ferroviarios, liquidándose a su vez esta  en el año 2003 y pasando  sus contratos de concesión  al Instituto Nacional de Concesiones (INCO, hoy ANI que fue creado con el propósito de  estructurar, contratar, ejecutar y administrar los negocios de infraestructura de transporte de carretera, fluvial, marítimo, férreo y portuario, desarrollados con inversión privada.


Tren. Foto de la Agencia Nacional de Infraestructura  ANI. 


Las inversiones actuales para recuperar el ferrocarril

Según lo expresado por el gobierno nacional las inversiones en los corredores férreos se encuentran  en  un contrato interadministrativo  con la Financiera de Desarrollo Territorial (Findeter) para la vigilancia y mantenimiento del corredor férreo del Pacífico, y la modernización de la infraestructura del corredor Bogotá-Belencito, ascendiendo a $224 mil millones que serán destinados a recuperar los 498 kilómetros del tramo Buenaventura – Cali – Zarzal - La Tebaida; y para aumentar la capacidad operativa de carga en los 308 kilómetros del corredor entre Bogotá y Belencito.

De acuerdo con la ANI, solo en 2023 por este corredor fueron movilizadas 23.298 toneladas de carga y 424.016 pasajeros a través del tren turístico, el tren de Navidad ‘Boyacá en tren’ y el transporte a estudiantes de universidades.

De otra parte para  el mismo corredor la ANI ejecuta otro contrato interadministrativo de asistencia técnica con Findeter que incluye la operación y mantenimiento de los corredores férreos Facatativá-Bogotá- Belencito y La Caro-Zipaquirá.

Según  lo manifestado por el jefe de Estado Gustavo Petro: ” Se ha  pasado en el tramo Dorada-Santa Marta de transportar 60.000 toneladas a 180.000 toneladas al año”; destacando  que ese tramo llegará hasta Buenaventura con el tramo del Pacífico que comenzó a ser reactivado para que los puertos del Caribe se articulen con los del Pacífico”, señaló el mandatario..

Así mismo en el anuncio oficial se estudia la posibilidad de articular a Bogotá con el ferrocarril  central hacia el mar por Zipaquirá, realizando consultas previas con las comunidades chocoana y emberas del Darién para construir la línea Cupica-Urabá, mientras que el Batallón de Ingenieros del Ejército se encargaría de construir el tramo Villavicencio-Puerto Gaitán, y desde allí continuar la navegación a través de los ríos Meta y Orinoco hasta el mar Caribe.

 

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